EL SISTEMA INMUNITARIO
Desde que nacemos nos encontramos continuamente expuestos a padecer infecciones y enfermedades, frente a los cuales no lograríamos sobrevivir si no fuera porque disponemos de un complejo sistema o que nos defiende ante estas situaciones, el sistema inmunitario.
¿Qué es?
El sistema inmunitario está constituido por una gran variedad de células y moléculas capaces de reconocer y eliminar un número ilimitado de diferentes agentes extraños al organismo, entre los que se incluyen no sólo los microorganismos invasores sino también las células de nuestro cuerpo, que constantemente sufren cambios.
El sistema inmunitario esta encargado del reconocimiento de nuestra propia integridad, de lo que constituye nuestro “yo”, y de este modo poder defendernos de lo extraño a cada uno de nosotros. Por esta razón, este sistema ha resultado ser fundamental en el mantenimiento de la homeostasis corporal, siendo un claro sistema regulador.
¿Cómo funciona?
Las células del sistema inmunitario, los leucocitos, tienen una amplia capacidad funcional y presentan múltiples y complejas formas de comunicación. Todo el conjunto de mecanismos que utilizan estas células para llevar a cabo su función se denomina “respuesta inmunitaria” y ésta se desarrolla en tres fases:
1) Reconocimiento de lo extraño (el antígeno)
2) Activación frente a ese antígeno
3) Fase efectora en la que se destruye lo extraño (la infección o las células malignizadas).
EFECTO DEL EJERCICIO FISICO EN EL SISTEMA INMUNITARIO
Centrándonos en los efectos que el ejercicio físico produce en el sistema inmunitario, hay que tener en cuenta que los mismos son complejos y variados al depender de la propia complejidad tanto del sistema inmunitario como del ejercicio.
¿Cómo afecta el ejercicio?
Las consecuencias del ejercicio en el sistema inmunitario dependerán de:
- Tipo
- Intensidad
- Duración
- Estado del individuo (no es lo mismo en un sujeto entrenado que en un sedentario)
- Momento de la valoración inmunitaria (inmediatamente tras la finalización de una actividad física o transcurrido un tiempo)
- Estrés que suponga a cada individuo la realización de una práctica deportiva.
Es este último un aspecto que hay que tener presente, pues el ejercicio físico es un modelo que genera estrés y por consiguiente la estimulación de vías hormonales con la consecuente producción de hormonas que puede darse con la realización de ejercicio, y esto repercute sobre la función inmunitaria.
Resultados
En humanos se han estudiado la función inmunológica en diversos grupos:
- Deportistas de élite como grupo sometido a un sobre entrenamiento.
- Personas que realizan ejercicio con entrenamiento pero moderado.
- Sedentarios a los que se somete a diferentes pautas de ejercicios puntuales.
Los Resultados encontrados en dichos estudios son los siguientes:
Un sobre entrenamiento como el que manifiestan los deportistas de alta competición, consigue disminuir la función inmunológica mientras que un entrenamiento moderado aumenta la actividad de las células inmunes y mantienen en mejor estado el sistema inmune, mientras que tanto los ejercicios agudos como el entrenamiento forzado o el sobre entrenamiento la inhiben.